Tiempo
Te miro
mientras te reís, pareces un montón de cascabeles mezclados con violines. Está
llegando el fin, o algo así, y todavía no me aprendí los nombres de las calles. Te creció mucho el pelo desde la última vez que nos vimos, cuando ya dejábamos
de conocernos un poco, pero a mis ojos índicos todavía les gusta la silueta que
proyectas. Seguís oliendo a cosas blancas y pulcras, pero ya no es ropa limpia.
Desde que
nos conocimos, desde que somos calaveras de diamante, desde que descubrimos que
teníamos movimientos compatibles, desde que nos salieron las muelas del juicio
y nos asustamos y nos quisimos ir pero no sabemos a dónde, o no tenemos a
dónde.
Me enredo
en las sabanas, te enredas en mi pelo y si pestañeas muy rápido tenemos
diecisiete de nuevo. Hoy fume un cigarrillo menos, capaz algún día necesite mis
seis minutos para decirte algo importante. Y me volví jirones parada en la
vereda de tu casa mientras tu nariz perfecta se reía de mí, mientras me
sostenía de las suelas de tus zapatos nuevos.
Todo se prendió
fuego pero nada importa si somos puras agallas.
Muy bueno, sos genia.
ResponderEliminarGracias <3
ResponderEliminarEscribís hermoso! Necesito leer más cosas tuyas!
ResponderEliminarEsto es perfecto, te amo y amo cómo escribís
ResponderEliminarSos impresionante! La particularidad con la que escribís hace que parezca que las palabras van bailando mientras uno las lee, revolcándose en el piso en cada punto y a parte. Tengo un blog y me encantaría que fuera como el tuyo, me encantaría que lo leyeras, porque hasta me parecería un honor que lo critiques, aunque sea trillado, un poco mediocre y cursi. Lo dejo por las dudas (con las ganas) de que veas el comentario cholulo y te den ganas de revisar: malasuerteconel13.blogspot.com.ar
ResponderEliminarSos muy genia.
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