Postguerra
Nos pegamos
un saque de sangre en una avenida, sabe bien y nos relamemos las comisuras de
los labios pero no dejamos de sentimos enfermos, porque escurre de nuestra
propia nariz. Todavía estamos vestidos rescatando el poco perfume a sábado que queda
en nuestros trajes. Me duermo en tus hombros con el pelo empapado. Tus lunares
se reagrupan y reorganizan según el porcentaje de tensión, así son constelación
cuando te guareces en mis piernas como un cachorro, y son plaga de langostas
cuando solo te acuerdas lo que hago mal, que por cierto es todo.
Te puedo
sentir retirarte, el ruido que hacen tus zapatos cuando bajas las escaleras,
como un batería empujada desde una terraza, como un emulador del big bang. Así
que otra vez caerse y levantarse, otra vez el pandemónium, otra vez los
escolares que gritan en el colectivo de regreso a casa, otra vez desayunar
aspirinas y jugo de naranja.
Y hay que
vivir igual, incluso si el aire corre con densidad de tristeza real, como si
hubiera muerto el rey. Incluso si tu ombligo de espiral, único moderador de la
ansiedad, deja lugar al silencio que tanto tiene para musitar. Incluso si las
cosas son derramadas en la pileta del baño, las canciones cantadas en mal
francés, y los días vampíricos me muerden la garganta.
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ResponderEliminarque hermoso!!♡
ResponderEliminarLa puta madre que lindo
ResponderEliminarqué bien escribís♥
ResponderEliminarqué bien escribís♥
ResponderEliminarMe en can tó !!!
ResponderEliminarMe siento como cuando mi vieja era una pendeja fan de Kiss y los flacos un día salieron sin las caras pintadas, como que ya sabés que usan máscaras pero te asombrás igual cuando los ves como son. Escribís re mil bonito camigix ♥♥♥
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